Hábitos diarios para comer con intención
Respira profundamente tres veces, mira tu plato y agradece a quien lo hizo posible. Este micro-ritual desconecta el piloto automático, reduce el ritmo y te coloca en un estado mental que favorece elecciones conscientes y digestiones más amables.
Hábitos diarios para comer con intención
Masticar despacio no es una moda: mejora la señalización de saciedad, favorece la digestión mecánica y libera sabores ocultos. Intenta contar mentalmente, soltar el cubierto entre bocados y notar cómo cambia tu relación con cada textura.
Hábitos diarios para comer con intención
Cuando el calendario aprieta, planifica pausas breves con fruta, frutos secos o legumbres preparadas. Comer sin prisas durante cinco minutos vale más que almorzar de pie con prisa. Comparte tus trucos de organización y ayuda a la comunidad.